Niñera para una paternidad saludable

¿Recuerdas esa sensación de felicidad el día que descubriste que estabas embarazada? ¿La emoción y la alegría que sentiste por todo tu cuerpo con todas esas imágenes de lo que sería tu vida familiar y todos los grandes momentos que estaban por llegar?

Estoy segura de que todo eso se hizo realidad y las emociones finalmente han superado tu imaginación, pero también estoy segura de que, además, te enfrentas a nuevos desafíos, como guardar un espacio para ti y tu pareja sin vuestros hijos.

La realidad es que amamos tanto a nuestros hijos que es difícil para nosotros dejarlos en casa para hacer cosas juntos como pareja. Recuerdo aquellos días en que podía leer un libro, relajarme en la cama después del desayuno o ver una película sin ninguna presión de que alguien se iba a despertar de un momento a otro.

A pesar de que adoro nuestra vida familiar, a veces echo de menos parte de la vida de pareja que tenía antes. ¿Cómo superar eso? Bueno, antes que nada, no te rindas. Es posible hacerlo. Es posible encontrar tiempo y reservar una niñera (aunque duela un poco la cartera, vale la pena cada euro), tener una abuela, una sobrina o cualquier persona que se haya ofrecido a cuidar a sus hijos. Vuestros hijos se lo pasarán en grande y verán esa noche como una noche especial haciendo algo diferente. Mientras tanto, podrás volver a conectarte,  hablar, reír, beber un poco de vino y relajarte durante unas horas con tu persona especial.

Somos más que padres, así que, no permitamos que la paternidad nos absorba y seamos personas individuales e independientes que conservan su tiempo en pareja de vez en cuando.

Es difícil establecer con un equilibrio general para todos, ya que cada persona es única y por lo tanto será feliz hacienda cosas diferentes a otras personas, pero sugiero que cada uno mire en su interior y trate de encontrar su equilibrio personal ideal entre: familia, pareja, amigos y estar solo con uno mismo.

Puede que tu nivel óptimo de equilibro baste con salir a cenar una vez al mes o ir a correr una vez por semana; es posible que necesites hacer yoga dos veces por semana y puedas leer 30 minutos todos los días; también es posible que necesite salir de la ciudad con su pareja 4 días sin los niños cada 2 meses…

No existe una ciencia exacta, pero lo que sí es cierto es que, más de lo que deseamos, tendemos a dejar que las responsabilidades nos hagan se olvidar nuestras necesidades individuales y de pareja. Esto puede conducir a algún tipo de frustración interna tal vez inconsciente o tal vez no.

Sugiero que todos nos preguntemos cómo fue la vida que habíamos imaginado y cuál es la vida que tenemos ahora. La buena noticia es que podemos acercarnos a ella en cualquier momento. Solo es cuestión de planificar y hacer pequeños esfuerzos cuando estamos (la mayoría de las veces) cansados ​​o vagos para ponernos nuestro atuendo elegante y salir a cenar.

En mi caso, pocas veces me he arrepentido de haber hecho el “esfuerzo”. Es más fuerte el beneficio que la energía que se necesita para luchar contra la voz interna diciendo: «cancela esa reserva, cancela esa cena, cancela…». Siempre me siento más vital y renovada después de una cena romántica o una cena con buenos amigos. Me devuelve a mis raíces, a mi yo anterior, a mi yo egocéntrico, que es un lugar que es agradable visitar siempre que se pueda.

En MissBabysitter, alentamos una paternidad saludable que respete las necesidades de cada miembro de la familia, como individuos, y especialmente la pareja como base de la familia, que sostiene la unidad y es, al final del día, donde todo empezó 🙂