Babysitter

El trabajo que realiza una babysitter va mucho más allá de cuidar del niño que queda a su cargo y de encargarse de que se encuentre seguro y con todas sus necesidades físicas atendidas.

Una buena niñera se ha de encargar también de que sus necesidades afectivas se encuentren completamente cubiertas, ya que de ello depende en gran medida el correcto desarrollo del pequeño.

Precisamente en esto consiste la teoría del apego seguro. Las experiencias del bebé con sus cuidadores (padres, familia o en nuestro caso babysitters) durante los primeros meses de vida influyen de manera notable en cómo se enfrentará este niño a los problemas una vez llegada la etapa adulta.

Los bebés que se han sentido protegidos en todo momento, que han visto atendidas sus necesidades enseguida, que han tenido un contacto físico con el cuidador en todo momento y que se han sentido queridos sabrán afrontar los problemas de manera segura y firme, sin dudas ni traumas.

Han tenido lo que se conoce como un apego seguro

Como decimos este apego no tiene por qué darse únicamente con los padres, sino que puede establecerse con abuelos, tíos, profesores y, cómo no, con las niñeras que cuidan de ellos.

Por el contrario, aquellos pequeños que se han visto «abandonados» a menudo, que no se han sentido cuidados, que no han sido acunados o no han tenido un contacto físico continuo por parte de sus progenitores o cuidadores sufren de lo que se conoce como apego inseguro o desorganizado.

Estos niños tendrán muchas más oportunidades de desarrollar estrés y depresión en un futuro o incluso sentar las bases de un trastorno mental.

Es por ello tan necesario que una buena babysitter no solo sepa hablar en inglés al niño para que coja los conceptos del idioma lo antes posible o haga todo lo posible porque al niño no le falte de nada en ningún momento. Una buena babysitter debe estar con el niño, ofrecerle cariño y contacto físico, mostrarle seguridad y estima.

Una buena niñera debe sentir amor por los niños que cuida, porque este tipo de cosas no pueden ser fingidas.

El niño sentirá este apego y crecerá seguro, sabiendo que aunque a veces llore este estado no genera hostilidad ni miedo, sino preocupación por su bienestar e inmediata respuesta.

Este apego por el niño y la recíproca respuesta que recibe la cuidadora, es lo que diferencia a una buena niñera de una que simplemente se encarga de que no le pase nada al niño.

En missbabysitter.com sabemos la importancia del apego seguro y por ello contamos con profesionales que no solo están preparados académicamente, también sienten pasión por su trabajo con los pequeños lo que les dota de emociones positivas que se transmiten minuto a minuto en las actividades y rutinas.

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