¿Cuándo pueden dejar de usar pañales los niños?
¿Cuándo pueden dejar de usar pañales los niños?
La respuesta es que no hay un momento específico para empezar a usar el baño ya que cada niño es diferente. El proceso debe de ser natural y gradual. Y, sobre todo, no estar determinado por la urgencia de los padres, por que llega el verano o por que otros niños ya han dejado de usar pañales en la familia o entre los niños de los vecinos.
Es recomendable hablar sobre las funciones naturales del cuerpo a una edad temprana para que al niño se le haga familiar y reconozca las dos necesidades básicas del cuerpo humano. En genera, los niños empiezan a tener interés en ir al baño rondando los 15 meses. Si le compras un pequeño orinal a una edad temprana y empieza a verlo como algo normal, tu hijo empezará a acostumbrarse a sentarse en él de vez en cuando solo por diversión. Algunos niños lo ven como algo normal rápidamente y lo van usando, otros prefieren utilizar el baño para adultos directamente saltándose el momento “orinal” y otros no tienen el menor interés en dejar de usar pañal hasta una edad más avanzada.
Este proceso llega de forma natural, ya que ellos mismos son los que comienzan a darse cuenta que no les agrada la sensación de sentirse mojados o sucios. Puedes ayudarles a que se les haga más sencillo utilizando ropa cómoda que puedan quitarse y ponerse fácilmente ellos mismo dentro de casa. Así, seguramente preferirán utilizar el baño antes que hacer sus necesidades en su pañal. Puede que haya algún que otro incidente mientras aprenden a hacerlo bien (dentro del wc), pero esto es parte del proceso, ¡tómatelo con calma! 🙂
Una vez hayan aprendido a sentarse en el orinal o en el baño puedes enseñarles a cómo utilizar el papel de baño, a subirse o bajarse los pantalones, a tirar de la cadena y a lavarse las manos al terminar antes de salir del cuarto de baño.
No deben de sentir que hay presión, o una estrategia para que aprendan el proceso. Sobre todo, no deben de ser castigados o regañados ya que el desarrollo tiene que formar parte del proceso del aprendizaje del niño de cómo funciona su entorno.
La idea más importante es recordar que debemos promover que los niños crezcan en un ambiente de respeto que conlleva tener paciencia, descubrimientos personales y no seguir la agenda de un adulto que tiene prisa en conseguir su objetivo y no el que corresponde a la edad del niño.